Cuáles son las leyes y principios de la Gestalt

Las leyes y principios de la Gestalt son una serie de reglas que explican la percepción visual, el término Gestalt proviene del alemán y puede traducirse como «forma«, «figura«, «configuración» o «estructura«. La denominada psicología de la forma o de la configuración es la psicología de la Gestalt nacida en Alemania a principios del siglo XX.

La mente configura, a través de ciertos principios, los elementos que llegan a ella a través de los canales sensoriales o de la memoria. Los canales sensoriales preponderantes son los cinco sentido mientras que el canal de la memoria es el pensamiento, la inteligencia y resolución de problemas.

La experiencia que tenemos en la interacción con el medio ambiente es mucho más que la información primaria que nos llega a los sentidos. Esto significa que la organización básica de cuanto percibimos está en relación con una figura en la que nos concentramos, que a su vez es parte de un fondo más amplio, donde hay otras formas. 

Las Leyes Generales

Las leyes de la Gestalt son una serie de reglas que explican el origen de las percepciones a partir de los estímulos. Existen varios principios particulares, que se fundamentan en dos reglas generales: la ley de buena forma y la ley de figura y fondo.

La ley de buena forma afirma la tendencia de la experiencia perceptiva a adoptar las formas más simples posibles. Esta ley permite la fácil lectura de figuras que se interfieren formando aparentes confusiones, pero en donde prevalecen sus propiedades de «buena forma» o destino común, se ven como desglosadas del conjunto.

La ley de figura y fondo explica que la figura es la zona de la percepción en la que se centra la conciencia y el fondo es el resto de la percepción. La ley establece que no es posible percibir simultáneamente la misma zona como figura y fondo, siempre existen elementos en los que la conciencia se centra y elementos que esta ignora. 

Los Principios de la Gestalt

La teoría Gestalt se propone explicar que el cerebro humano intentará simplificar y organizar imágenes complejas o diseños de muchos elementos, al organizar inconscientemente las partes en un sistema organizado que crea un todo, en lugar de solo un serie de elementos dispares.

Con el fin de comprender mejor el entorno en el que vivimos, nuestro cerebro identifica estructuras y patrones que nos facilitan la lectura. En este sentido las leyes y principios de la Gestalt están basados en la inclinación natural del ser humano para entender los objetos y las estructuras en su conjunto, más que por la suma de sus partes.

Principio de Proximidad

Determina que los elementos que están a una distancia cercana suelen ser percibidos como un grupo o como un mismo objeto, tienden a ser vistos como una unidad. El principio de proximidad habla del agrupamiento parcial o secuencial de elementos que lleva a cabo la mente, con base en la distancia.

Los elementos aislados, pero con cierta cercanía, tienden a ser considerados como grupos. Los estímulos que están próximos tienden a percibirse como parte de la misma unidad.

Principio de Continuidad

Es un principio de la psicología Gestalt donde se explica que la mente tiende a seguir un patrón aunque no se lo observe de manera concreta. Esto se debe a que los elementos orientados en la misma dirección tendemos a organizarlos de una forma determinada.

La organización es producto de una preferencia interpretativa de la información visual que recibimos, optamos por percibir una interpretación en la que conectamos la información recibida en lugar de desconectarla. Cuando observamos una secuencia que está organizada y dispuesta en una dirección, continuamos la secuencia hasta que aparezca algo significativo.

En la imagen anterior observamos el recorrido de dos líneas de puntos que se cruzan, y no percibimos que se puede tratar de cuatro segmentos de líneas diferentes que se encuentran en un mismo punto.

Principio de Dirección Común

Implica que los elementos que parecen construir un patrón o un flujo en la misma dirección se perciben como una figura. Por ejemplo, los elementos no necesitan moverse para que el principio del destino común esté presente en la forma en que lo percibimos.

Los elementos que se mueven en la misma dirección se perciben como una figura, por ejemplo, las bandadas de pájaros que vuelan como un todo, es decir, como si se tratara de un organismo único.

Principio del Cierre

Determina que las formas cerradas y acabadas son más estables visualmente, por lo tanto esta percepción hace que tendamos a cerrar y a completar con la imaginación. Se caracteriza por la tendencia de nuestro cerebro a completar los espacios de una composición cuando los elementos no llegan a cerrarse.

Generamos los detalles que faltan y damos uniformidad a las figuras, eliminando a su vez los detalles innecesarios. Agregamos elementos faltantes para completar la figura y de esta manera la imaginación nos ayuda a percibir con la mayor organización posible.

Principio de Semejanza

La mente tiende a agrupar los elementos similares en una entidad basándose en características distintivas como el color, el tamaño y/o la forma, entre otros aspectos visuales. De esta manera, los elementos con atributos visuales semejantes se perciben como pertenecientes a un mismo grupo o entidad, sin importar la distancia que los separe y sólo por ser similares.

Principio de Simetría

Los elementos simétricos en una imagen se perciben como iguales, y desde cierta distancia, se interpretan como pertenecientes al mismo grupo. Del mismo modo, los elementos que tengan una inclinación u orientación similar se asocian con un mismo conjunto.

Este principio tiene tal trascendencia que va más allá del campo de la percepción de las formas y constituye uno de los principios o fenómenos fundamentales de la naturaleza.

Principio de Simplicidad

Este principio afirma que las personas solemos organizar los campos perceptuales con rasgos simples y regulares. Es decir habrá una tendencia hacia las buenas formas de simetría, regularidad y uniformidad.