Los Problemas con la Formación de Equipos
En este artículo te explicamos los principales problemas con la formación de equipos y como evitarlos para tener éxito.
Los eventos de formación de equipos pueden ser beneficios valiosos para muchos empleados si se gestionan de manera eficaz. Pero con demasiada frecuencia, fracasan y equivalen a gastos costosos que producen poco o ningún valor o, lo que es peor, dificultan el compromiso de los empleados.
A menudo se considera que estas actividades brindan beneficios a los empleados; desafortunadamente, si a los empleados no les gustan los eventos, no obtendrán muchos beneficios.
Los esfuerzos de creación de equipos son efectivos cuando los y las participantes entienden lo que significa el término «formación de equipos». Este término es la acción o proceso de hacer que un grupo de personas trabajen juntos de manera efectiva como un equipo, especialmente por medio de actividades y eventos diseñados para aumentar la motivación y promover la cooperación.
Con demasiada frecuencia, las empresas interpretan la definición de ‘formación de equipos’ como simplemente hacer algo divertido fuera del entorno típico de la jornada laboral: cursos de cuerdas, clases de cocina, ejercicio deportivo.
Cuando el enfoque no está definido o el evento sólo es social en lugar de el aprendizaje experiencial, la formación de equipos no ocurrirá.
¿Cómo puede hacer que los eventos de formación de equipos sean valiosos?
Existen factores clave que pueden aumentar las probabilidades de que los esfuerzos de creación de equipos produzcan los resultados deseados.
Primero, recuerde que la creación de equipos debe ser un proceso, no un evento. Construir equipos fuertes toma tiempo.
Considere que es probable que sus equipos siempre estén cambiando. Los nuevos empleados se unen al equipo, mientras que otros empleados se van.
Los objetivos organizacionales cambian. El ambiente de trabajo cambia.
Los eventos únicos a menudo generan un parpadeo en la mejora, pero no se mantienen. Los eventos de formación de equipos que se secuencian a lo largo del tiempo, con un seguimiento ciclos de acción-aprendizaje, pueden ser altamente efectivos.
En segundo lugar, vincule los resultados medibles a estos eventos. Tener una comprensión clara y explícita de lo que quiere lograr, y por qué. Entonces el evento puede diseñarse para lograr esos objetivos.
Sin un enfoque u objetivos definidos, es probable que el evento no logre valor porque no resuelve los problemas reales o los problemas que puede enfrentar un equipo.
Tercero, comparta los resultados deseados. Uno de los ingredientes más importantes para un ejercicio exitoso de formación de equipos es la claridad.
Tu equipo necesita entender lo que se supone que deben lograr con el ejercicio. Si entienden el objetivo, naturalmente estarán más comprometidos.
Cuanto más específico sea el objetivo, mejor. «Construir un equipo fuerte», por ejemplo, es un objetivo vago.
Una mejor declaración de objetivos sería «conocer las habilidades de cada personas para aprovechar su potencialidad y saber que objetivos se pueden alcanzar». Los objetivos concretos ayudan a que los ejercicios de creación de equipos se sientan más relevantes.
