Técnica de Fichas de Conversación para Discusiones Grupales
La técnica de Fichas de Conversación es una buena actividad para animar a todos a participar y regular las diferencias entre los que hablan demasiado y los que hablan poco.
Reúna al grupo y entregue a todos los participantes la misma cantidad de fichas. Si no tienes fichas, puedes utilizar papel cortado de las mismas dimensiones, botones, caramelos, cartas de póquer o lo que se te ocurra que sirva para el ejercicio.
Explique al grupo que para participar en la discusión y poder hablar es necesario pedir la palabra y utilizar una de las fichas recibidas. Durante la discusión, cada vez que una persona habla debe tirar una ficha al centro de la mesa.
Cuando una persona se queda sin fichas, automáticamente se convierte en un “oyente” de la discusión y escucha atentamente al resto de los participantes que aún pueden hablar. Es importante aclarar que las fichas no se pueden transferir ni regalar entre personas.
Esta técnica no sólo regula e iguala el número de participaciones por persona, sino que también puede provocar un salto de calidad en el contenido de la discusión.
Cuando las personas saben que no pueden hablar todo el tiempo y en cualquier momento, se limitan a escuchar más, pensar y reflexionar con más datos y hacer observaciones más profundas y complejas. El pensamiento complejo eleva la calidad de las discusiones y las hace más fructíferas.
Utiliza esta técnica repetidamente para practicar el arte de la discusión y el debate con tu equipo de trabajo. Para desarrollar habilidades de escucha activa, pensamiento complejo y argumentación es necesario ejercitarlas.
